El liderazgo de Dios

Este sermón se centra en Deuteronomio 31:1-8, un pasaje que marca la transición del liderazgo de Moisés a Josué mientras el pueblo de Israel está a punto de entrar en la Tierra Prometida después de 40 años en el desierto. El mensaje principal es un llamado a la confianza inquebrantable en Dios como el líder supremo, por encima de cualquier líder humano.

Moisés, a sus 120 años y sabiendo que no cruzará el Jordán debido a su desobediencia pasada, le recuerda al pueblo y a Josué que no deben temer. Les asegura que Dios mismo irá delante de ellos, peleará sus batallas y les dará la victoria sobre las naciones de Canaán. Se enfatiza que, aunque los líderes humanos cambien, la fidelidad y el poder de Dios permanecen inmutables.

El orador destaca tres puntos clave:

  1. El fin del liderazgo de Moisés y el traspaso a Josué: Moisés, a pesar de su larga trayectoria, reconoce sus limitaciones físicas y la prohibición divina de entrar en Canaán. Sin embargo, antes de anunciar a Josué, subraya que el verdadero líder de Israel es Dios.
  2. Recordatorio de la obra de Dios y llamado a la obediencia: Se les recuerda al pueblo las victorias pasadas de Dios (como con Seón y Og) y se les insta a ser “firmes y valientes”, sin temor, porque Dios está con ellos. La obediencia a los mandamientos de Dios es crucial para evitar la idolatría y la ruina.
  3. Aliento directo a Josué y al pueblo: Moisés públicamente anima a Josué con las mismas palabras de fortaleza, recordándole que Dios irá delante de él y no lo desamparará. Este aliento se extiende a todo el pueblo, recordándoles que cada uno tiene un llamado y que, al ser fieles en su función, contribuyen al crecimiento del cuerpo de Cristo.

La gran lección de Moisés es confiar plenamente en Dios y no dudar de su llamado o su provisión. La obra de Dios no se detiene y Él usa a hombres y mujeres fieles, independientemente de su edad o el “brillo” de su ministerio, para glorificarse. Finalmente, se concluye que nuestra esperanza y fortaleza no deben estar en líderes humanos, sino en el Dios inmutable y fiel, quien nos provee todo lo necesario para la vida y la piedad.


Versículos Clave del Sermón:

  • Deuteronomio 31:3: “Jehová tu Dios, él pasa delante de ti; él destruirá estas naciones delante de ti, y las desalojarás; y Josué pasará delante de ti, como Jehová ha dicho.”
  • Deuteronomio 31:6: “Esforzaos y cobrad ánimo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque Jehová tu Dios es el que va contigo; no te dejará, ni te desamparará.”
  • Deuteronomio 31:8: “Y Jehová va delante de ti; él estará contigo, no te dejará, ni te desamparará; no temas ni te intimides.”
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